Una de las actividades que he realizado
en cursos anteriores ha sido la creación de una cometa. Durante el
tiempo que he estado como asesor he recordado muy gratamente esta
experiencia. Así que decidí retomarla este curso con el objetivo de
potenciar el aprendizaje asociado a elementos de emociones
placenteras. Tal y como se muestra en esta imagen del primer año en el que iniciamos el proyecto.
Uno de los criterios de evaluación fundamentales en la formación tecnológica es que el alumno pueda crear un elemento que le permita poner en práctica las competencias asociadas al diseño y construcción de un determinado objeto. Y esto se consigue con la cometa.
Este año los alumnos han podido, en su gran mayoría, construir su cometa en una situación de confinamiento. Ha sido una actividad muy acertada para la situación actual ya que los materiales son muy fáciles de conseguir y de realizar en casa. Pero sobre todo me ha gustado porque la cometa ha sido la esperanza que muchos alumnos han tenido de poder salir de sus casas cuando todo pasara para poder volarla.
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