El Museo de la Ciencia y la Tecnología del CFPA Mercè Rodoreda se podría decir que surge por casualidad, aunque la palabra exacta debería de ser serendipia, pues aunque no se buscara existían todos los condicionantes para que esta se produjera. Estos condicionantes se resumen en tres puntos:
En primer lugar, soy un apasionado de los museos de ciencia y tecnología y durante los últimos años siempre que he viajado he intentado visitar aquel museo que ha estado a mi alcance.
En segundo lugar, he profundizado intensamente durante los últimos años en las necesidades de los alumnos de formación de personas adultas para la obtención del Graduado en Educación Secundaria. Necesidades que se pueden cubrir fácilmente enfocando la formación al desarrollo de competencias.
En tercer lugar mi tendencia a escuchar a los alumnos y adaptar la formación a sus capacidades y necesidades de desarrollo me llevó a proponerles una actividad libre de tecnología. Los alumnos me presentaron las primeras piezas que me llevaron a pensar en el museo como solución para impartir ciencia y tecnología con una asignación horaria de 1 hora semanal.
Y finalmente se creó el Museo Físico que, gracias a la colaboración de los alumnos, está formado por 60 piezas diferentes con las que aprender ciencia y tecnología de forma interactiva. Esta parte física del museo se complementa con un Museo Virtual que recopila, en formato de Padlets (herramienta de agregación de contenidos digitales), la descripción detallada, en formato digital, de las piezas anteriores.
Y finalmente se creó el Museo Físico que, gracias a la colaboración de los alumnos, está formado por 60 piezas diferentes con las que aprender ciencia y tecnología de forma interactiva. Esta parte física del museo se complementa con un Museo Virtual que recopila, en formato de Padlets (herramienta de agregación de contenidos digitales), la descripción detallada, en formato digital, de las piezas anteriores.