Los centros de formación de personas
adultas que imparten su formación en un centro penitenciario cumplen
una labor fundamental. No sólo para completar los estudios básicos,
sino como una forma de salir de un mundo de marginación en el que la
mayoría de los alumnos de estos centros han vivido desde pequeños.
Conocer, de la mano del profesorado, un mundo diferente es la
esperanza que los centros centros de formación de personas adultas
pueden traer a los reclusos.
Por esta razón la jornada que
organizamos desde el ámbito de Formación de Personas Adultas del
CEFIRE de la Comunidad Valenciana se tituló “UN MUNDO MÁS ALLÁ
DE LAS ESTRELLAS”.
Esta esperanza de un futuro mejor
también se quiso trasladar a los profesores que, aunque trabajan en
centros de menores, han de atender a alumnos que, en mayor o menor
medida, viven privados de libertad.
Adicionalmente se organizó un concurso
de dibujo entre los alumnos de los centros penitenciarios de la
Comunidad Valenciana. El dibujo ganador pasó a formar parte del
cartel de la jornada y el alumno recibió como premio un kit de
dibujo profesional.
Yo creo que se eligió este cartel por
el cariño que transmitía, el amor de una madre a un hijo. Una
necesidad que todos tenemos y que nos ayuda a vivir una vida mejor.
Una gran lección que nos recuerda un alumno sin formación básica
(por ahora), pero con una gran experiencia de vida.
